GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO

Es posible que algo como el conocimiento que pertenece inevitablemente a las personas se pueda gestionar en las organizaciones?
Cuando hablamos de gestión del conocimiento en las organizaciones, nos referimos a un proceso o una situación que permita trasferir los conocimientos o experiencias de una persona a otras personas pertenecientes a una misma organización.


¿Qué es la Gestión del Conocimiento?

Gestión del conocimiento es el proceso por el cual una organización, facilita la trasmisión de informaciones y habilidades a sus empleados, de una manera sistemática y eficiente. Es importante aclarar que las informaciones y habilidades no tienen por qué estar exclusivamente dentro de la empresa, sino que pueden estar o generarse generalmente fuera de ella.
Este concepto es aplicado en las organizaciones, que intentan transferir el conocimiento y la experiencia existente entre sus empleados, de tal manera que permita ser manejado como un recurso disponible para otros miembros de la organización.

Para gestionar el conocimiento se requiere:


Por qué es importante la gestión del conocimiento:

La Gestión del conocimiento implica ir mucho más allá que un simple sistema informático o plan de formación. Es esencial para favorecer una estructura empresarial innovadora y eficiente. Si el conocimiento fluye y se transmite de manera correcta en la organización, este solo puede crecer. Las habilidades e informaciones útiles se trasmiten entre los empleados de forma rápida y de esta manera aumenta la posibilidad de generar nuevo conocimiento que deriva en aplicaciones nuevas, mejoras en procesos o productos y nuevas formas de hacer negocio para alcanzar nuevas oportunidades.
No olvidar que el conocimiento es el único activo que crece con el tiempo y no se desgasta pero que puede desparecer con las personas, si este no es compartido. Se Conocen casos en los que la marcha de un empleado ha supuesto una pérdida de competitividad muy importante para una empresa por ser el único que disponía de un conocimiento muy concreto. Por eso es vital gestionarlo, tanto en grandes organizaciones vs en pequeñas organizaciones.

Los beneficios de Gestionar el Conocimiento.

Incremento en la profesionalización de las personas y sus roles laborales.
Integración de ópticas diversas y de enfoques complementarios.
Descentraliza el poder del conocimiento, lo comparte y reparte en todos los miembros de la organización, de acuerdo a sus roles y funciones.
Permite proyectar con claridad la mirada común de la organización: la visión y la misión, reduciendo incoherencias internas, estandarizando procedimientos y calidad del servicio.
Validación de estrategias y acciones comunes de tal forma que se comparten las evaluaciones y en equipo se generan modelos de cambio.
Genera una organización con mayor nivel de flexibilidad, por tanto más atenta a generar acciones de adaptación a los nuevos escenarios, posibilitando incluso la creación de ellos (pro-actividad organizacional).
Potencia los valores comunes, el compromiso hacia la organización, se comparten los ejes vitales de la organización, no existen áreas secretas, los dilemas y problemas se socializan y las soluciones emergen del análisis y del compartir conocimientos y experiencias.
Se comparte el liderazgo, se anima una cultura empresarial y organizacional con clara opción hacia el trabajo en equipo. Esto permite compartir los dos mayores bienes o “activos” de las personas: lo que se sabe, la información que se ha adquirido y que se maneja (conocimiento) y los modos exitosos de resolver la práctica laboral (experiencia).


GESTIÓN DEL CONOCIMIENTO

Es posible que algo como el conocimiento que pertenece inevitablemente a las personas se pueda gestionar en las organizaciones?
Cuando hablamos de gestión del conocimiento en las organizaciones, nos referimos a un proceso o una situación que permita trasferir los conocimientos o experiencias de una persona a otras personas pertenecientes a una misma organización.

¿Qué es la Gestión del Conocimiento?
Gestión del conocimiento es el proceso por el cual una organización, facilita la trasmisión de informaciones y habilidades a sus empleados, de una manera sistemática y eficiente. Es importante aclarar que las informaciones y habilidades no tienen por qué estar exclusivamente dentro de la empresa, sino que pueden estar o generarse generalmente fuera de ella.
Este concepto es aplicado en las organizaciones, que intentan transferir el conocimiento y la experiencia existente entre sus empleados, de tal manera que permita ser manejado como un recurso disponible para otros miembros de la organización.
Para gestionar el conocimiento se requiere:

Por qué es importante la gestión del conocimiento:

La Gestión del conocimiento implica ir mucho más allá que un simple sistema informático o plan de formación. Es esencial para favorecer una estructura empresarial innovadora y eficiente. Si el conocimiento fluye y se transmite de manera correcta en la organización, este solo puede crecer. Las habilidades e informaciones útiles se trasmiten entre los empleados de forma rápida y de esta manera aumenta la posibilidad de generar nuevo conocimiento que deriva en aplicaciones nuevas, mejoras en procesos o productos y nuevas formas de hacer negocio para alcanzar nuevas oportunidades.
No olvidar que el conocimiento es el único activo que crece con el tiempo y no se desgasta pero que puede desparecer con las personas, si este no es compartido. Se Conocen casos en los que la marcha de un empleado ha supuesto una pérdida de competitividad muy importante para una empresa por ser el único que disponía de un conocimiento muy concreto. Por eso es vital gestionarlo, tanto en grandes organizaciones vs en pequeñas organizaciones.
Los beneficios de Gestionar el Conocimiento.

Incremento en la profesionalización de las personas y sus roles laborales.
Integración de ópticas diversas y de enfoques complementarios.
Descentraliza el poder del conocimiento, lo comparte y reparte en todos los miembros de la organización, de acuerdo a sus roles y funciones.
Permite proyectar con claridad la mirada común de la organización: la visión y la misión, reduciendo incoherencias internas, estandarizando procedimientos y calidad del servicio.
Validación de estrategias y acciones comunes de tal forma que se comparten las evaluaciones y en equipo se generan modelos de cambio.
Genera una organización con mayor nivel de flexibilidad, por tanto más atenta a generar acciones de adaptación a los nuevos escenarios, posibilitando incluso la creación de ellos (pro-actividad organizacional).
Potencia los valores comunes, el compromiso hacia la organización, se comparten los ejes vitales de la organización, no existen áreas secretas, los dilemas y problemas se socializan y las soluciones emergen del análisis y del compartir conocimientos y experiencias.
Se comparte el liderazgo, se anima una cultura empresarial y organizacional con clara opción hacia el trabajo en equipo. Esto permite compartir los dos mayores bienes o “activos” de las personas: lo que se sabe, la información que se ha adquirido y que se maneja (conocimiento) y los modos exitosos de resolver la práctica laboral (experiencia).